La preocupación por las violaciones a los Derechos Humanos consignados en las Declaraciones Universal, Americana y Africana de Derechos Humanos y en distintas convenciones internacionales, entre ellas. la Europa, la Interamericana, el Pacto de Derechos Civiles y Políticos de la ONU y los Acuerdos de Helsinski, se ha venido extendiendo y profundizando pese a que son objeto de atención dentro de marcos institucionales. Es decir, dentro de los marcos de las organizaciones internacionales a las que los Estados han atribuido esa responsabilidad y, para ello, les confirieron las competencias requeridas a fin de hacerles señalamientos directos a los Estados o bien formularles recomendaciones a los gobiernos con el objeto de asegurar el debido respeto y la plena observancia de esos derechos.