Lucio Colleti denunciaba un extremo sobre el tratamiento actual de la democracia, advirtiendo cómo se ha ido creando una profunda divergencia inclusive entre el significado liberal de la palabra democracia y las diversas definiciones han vuelto a la democracia un término equívoco y por lo tanto vapuleado por la teoría y la historia. Una primera aproximación a las causas de la confusión democrática hablando en términos mundiales se debe a intereses estratégicos e ideológicos de las grandes potencias, esto que parece ser el lenguaje de una mala película norteamericana. Es cierto para los sistemas capitalistas la única democracia verdadera es la liberal, es más, esta es la democracia a secas, sin apellidos ni adjetivos; por el contrario el totalitarismo anti democrático es patrimonio de los países comunistas. No es necesario apuntar la justificada reacción de estos últimos: la democracia total es la que practican ellos, el resto es dictadura imperialista del capital.